Por eso para inciar las tutorizaciones a los pequeños se nos ocurrió a Sonia y a mi que podíamos empezar enseñando a la clase de los peques a hacer algo sencillo.
Ha sido todo un acierto y es que además de lo bonito de la actividad, ya se van conociendo mejor y las parejas se van ajustando y trabajan estupendamente.
Pero no solo los peques han aprendido, también a nuestra clase nos ha servido para trabajar y realizar aprendizajes nuevos, ya que para explicarlo teníamos que recordar y anotar los pasos necesarios para la realización de la figura que habíamos elegido que era un perro.
Los dibujos nos han permitido trabajar nociones matemáticas de geometría como los polígonos y los elementos de los polígonos, la simetría...
También recordar el texto instructivo.
Después todo ha ido "sobre ruedas" como podéis ver, aunque hemos aprendido también como cada vez que vamos con ellas, que hay que permitir que lo hagan ellos aunque no salga bien del todo y y ellos que "enseñar" no es fácil pero que puede ser muy pero que muy divertido.
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